La tormenta que dejó fuertes daños en el sur y centro de Córdoba, con lluvias que alcanzaron hasta los 50 milímetros, no tuvo impacto en la zona núcleo, donde los suelos de algunas regiones están reclamando un mayor aporte hídrico para poder avanzar con la siembra de soja y maíz.
De la Red de Estaciones Meteorológicas de la Bolsa de Cereales de Córdoba se desprende que en los departamentos Unión, Marcos Juárez, Juárez Celman y Presidente Roque Sáenz Peña, no se registraron precipitaciones.
En ese contexto, la Guía Estratégica para el Agro (GEA) de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) insistió con el riesgo de que haya "pulsos secos" que afecten a la campaña 2016/17 y que compliquen el rendimiento de los cultivos estivales.
Déficit
“En Argentina ya hay zonas con un marcado déficit hídrico. En caso de que continúe el pulso seco, el desecamiento superficial va a comprometer algunas situaciones de siembra de maíz y soja”, alertó al respecto José Luis Aiello, climatólogo de la GEA.
Técnicamente, “la acción del Pacífico no es eficiente en cuanto los ingresos de flujo de humedad, confirmando lo que sostenemos acerca de que son probables los pulsos secos. Aunque no se trata de una ‘Niña’, las altas temperaturas, sumadas al efecto que está produciendo el Pacífico es un cocktel adecuado para la aparición de nuevos episodios secos, configurando una campaña de muy difícil pronóstico”, consignó Aiello.
Esperando las lluvias
El informe de estimaciones agrícolas semanal del Ministerio de Agroindustria afirma, en este contexto, que “en Marcos Juárez se reporta una baja superficie (de soja) que por diversos motivos no pudo implantarse y dado la escasa humedad espera las lluvias para poder sembrarse” y que “el resto avanza en su crecimiento lentamente, dado la falta de humedad que ya marca un principio de sequía”.
El reporte completa que “el perfil de suelo presenta un déficit en los primeros 40 centímetros y en algunas zonas el cultivo comienza a marcar síntomas de stress”.
En maíz, sucede algo similar. En Marcos Juárez, Agroindustria asegura que “la humedad es escasa y hay un principio de sequía”; en Laboulaye, que “se esperan nuevos registros pluviométricos para afrontar las altas temperaturas de estos días”.
La situación es similar en otras zonas del País. Agroindustria señala, por ejemplo, que en Bragado “es necesaria la presencia de precipitaciones en el corto plazo para mantener el estado de los cultivos y para terminar de sembrar los lotes faltantes”.
Avance retrasado
Según la Bolsa de Cereales, se ha sembrado el 57,6 por ciento de las 19,6 millones de hectáreas esperadas para este ciclo con soja, lo que significa un retraso de 11 puntos porcentuales en relación a la campaña anterior.
“En varias regiones del centro y sur del área agrícola el agua disponible en el perfil del suelo no es suficiente para sostener a mediano plazo una buena condición del cultivo durante las etapas vegetativas en las que se encuentran muchos lotes sembrados en fechas tempranas”, advierte también esta entidad.